El líder criminal fue hallado escondido en una lujosa vivienda con pasadizo secreto. Su captura representa un duro golpe al crimen organizado en la región.
Tras casi seis meses de intensa búsqueda, el pasado 25 de junio fue capturado Adolfo Macías Villamar, alias “Fito”, considerado el narcotraficante más peligroso de Ecuador y líder de la banda criminal Los Choneros. Su fuga, ocurrida en enero de 2024 desde la cárcel de Guayaquil, desató una ola de violencia sin precedentes que sumió al país en una crisis de seguridad.
La captura fue posible gracias a un operativo conjunto del Ejército ecuatoriano y el Bloque de Seguridad, desplegado en la provincia de Manabí, al occidente del país. El delincuente fue localizado en una vivienda de alto lujo, equipada con piscina, gimnasio, mesa de billar y sofisticadas medidas de ocultamiento.
Uno de los hallazgos más reveladores fue un pasadizo secreto de concreto, diseñado para servir como escondite en caso de redadas. El compartimento, camuflado bajo una baldosa y cubierto con colchones y cobijas, podía sellarse desde adentro para dificultar el acceso de las autoridades.
Videos oficiales muestran el momento exacto en que los uniformados descubren el escondite, dejando en evidencia la complejidad del plan de evasión. Sin embargo, la rápida reacción del equipo de inteligencia permitió neutralizar cualquier intento de huida y asegurar la detención sin mayores incidentes.
Alias Fito, acusado de narcotráfico, extorsión, sicariato y vínculos con carteles internacionales, representa una de las piezas clave en las redes del crimen organizado transnacional que operan en la región andina y la costa pacífica.
La detención ha sido celebrada por el Gobierno ecuatoriano como un logro estratégico en la lucha contra las mafias criminales, y se espera que la información recuperada del operativo permita nuevas capturas y desarticulaciones.