Durante una reunión en la cumbre de la OTAN, el líder ucraniano planteó cooperación tecnológica y un posible alto al fuego con Rusia, mientras crece la presión internacional sobre Moscú.
En el marco de la cumbre de la OTAN celebrada en La Haya, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky, sostuvo una reunión clave de 50 minutos con el expresidente estadounidense Donald Trump, en la que propuso una alianza estratégica para la producción conjunta de drones de combate y la adquisición de sistemas de defensa antiaérea avanzados, particularmente los Patriot, indispensables para contener los constantes ataques aéreos rusos.
El encuentro, que ha sido calificado por Kiev como “franco y constructivo”, refleja el interés de Ucrania en reforzar su capacidad tecnológica y militar mediante acuerdos bilaterales, incluso con actores no directamente involucrados en la administración actual de EE. UU. Según fuentes diplomáticas, Zelensky también planteó la posibilidad de avanzar hacia un alto al fuego con Rusia, condicionado a garantías de seguridad y el cumplimiento del derecho internacional por parte de Moscú.
Trump, aunque sin compromiso formal, reconoció la urgencia ucraniana, especialmente en lo referente a los sistemas Patriot, y afirmó que “Ucrania merece protección, pero también debemos priorizar nuestras propias defensas”. El expresidente no descartó el envío de equipos, pero insistió en un enfoque “más estratégico” que involucre también a socios europeos.
Durante la reunión también se discutieron temas sensibles como las sanciones al petróleo ruso, la seguridad energética en Europa y la cooperación militar con potencias clave como Alemania, Francia, Reino Unido y Polonia. Zelensky habría pedido además el fortalecimiento de la presión internacional sobre Rusia por sus violaciones a los derechos humanos y su ofensiva sostenida sobre territorios civiles.
Uno de los puntos más críticos abordados fue el papel de Irán en el conflicto, dado que sus drones Shahed siguen siendo utilizados por las fuerzas rusas en el frente oriental. Según informes recientes, Estados Unidos ha lanzado ataques contra infraestructuras iraníes vinculadas a la producción de estos drones, debilitando parcialmente sus capacidades.
Con más de tres años de guerra ininterrumpida, Ucrania busca consolidar alianzas más allá del respaldo tradicional de la OTAN y la Unión Europea. La cooperación en tecnología militar, producción de armamento local y asistencia técnica es ahora una prioridad en la estrategia defensiva de Kiev, que apuesta por construir independencia táctica ante un conflicto prolongado.