Tres residentes de Laredo, Texas, fueron imputados por presuntamente suministrar armas de fuego para el Cártel del Noreste a través de la frontera de Nuevo Laredo, Tamaulipas.
De acuerdo con información del Departamento de Justicia de los Estados Unidos, Ángela Ruby Ponce, de 18 años; Óscar Axel Flores, de 22 años, y Mario Alberto Tovar, de 28, son señalados por los cargos de conspiración, contrabando de mercancías desde Estados Unidos, tráfico de armas de fuego y compra de armas de fuego directamente para el Cártel del Noreste.
Se espera que ellos tres comparezcan ante la jueza federal estadunidense Diana Song Quiroga, el 2 de mayo.
En la acusación formal se alega que desde el 1 de enero hasta el 2 de abril, los tres jóvenes conspiraron entre sí para traficar armas de fuego para el citado grupo delictivo.
En la información oficial se señala que el 2 de abril, ellos acudieron a un concesionario federal de armas de fuego en Laredo para comprar un rifle semiautomático y que luego de ello fueron detenidos por la autoridad de Estados Unidos, cuando pretendían dejar la nación y dirigirse a Nuevo Laredo, Tamaulipas, en México.
La denuncia penal presentada originalmente en el caso alega que el grupo trabajaba en nombre del CDN. Se cree que los tres compraron y transportaron al menos 12 armas de fuego al CDN en el transcurso de varios meses, según los cargos.