La muerte de un ejemplar de jaguar melánico, es decir, de color negro, mantiene enfrentados al gobierno estatal de Michoacán y al Ayuntamiento de Morelia.
El deceso del animal se derivó de una inundación de aguas negras en el interior del Zoológico de Morelia, a través de un arroyuelo, que según el gobierno de la capital michoacana, era de agua limpia.
Luego de está inundación, la hembra de jaguar bebió agua contaminada, según el reporte de las autoridades del Parque Zoológico “Benito Juárez” de Morelia, además de presentar daños renales y neumonía; a pesar del esfuerzo del equipo de expertos que trataron de salvarla, la cachorra murió.
Está situación ha causado una serie de declaraciones y acusaciones entre el gobierno estatal morenista y el Ayuntamiento, hasta hace unos días encabezado por Alfonso Martínez, candidato a la reelección por el PAN-PRD.
El Organismo Operador de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (OOAPAS) de Morelia, negó que la inundación haya sido por agua sucia y su responsabilidad, pero la administración del Zoológico y del estado asegura que sí, y mantienen la disputa.