El sufrimiento hermana. Delia Quiroa recuerda que la esposa del secuestrador y la esposa de la víctima andan buscando, juntas, a sus respectivos desaparecidos. Se conocieron en la Fiscalía de Veracruz y se hicieron amigas. También tiene presente que algunas treguas de paz con narcotraficantes han rendido frutos, al igual que la intervención de sacerdotes.
—¿Tienen conflicto moral por pedirle permiso al crimen organizado para buscar a sus familiares?—.
“Es que no nos queda de otra, tenemos mamás en el colectivo que sus hijos andaban metidos en el crimen organizado y no por eso las dejamos fuera. El sufrimiento hermana”, responde Quiroa.
La líder del Colectivo Nacional de Víctimas 10 de Marzo, fundado en Tamaulipas, dice en entrevista con MILENIO que “si estuvieran en nuestro lugar no dudarían en pedirle a quien se llevó a tu familiar que te lo regrese para dejar de batallar con el gobierno. Porque eso es peor, mucho peor. Que te quieren ver la cara de tonta, que te traen a vueltas y no investigan y no buscan, todo lo tenemos que hacer nosotras. Esa es una tortura que no termina”.
Delia Quiroa Flores Valdés ha estado bajo los reflectores por haber pedido una tregua a los líderes del Cártel del Golfo, en 2021. Y recientemente, apenas en marzo, por solicitar la colaboración de narcotraficantes de Los Caballeros Templarios.
La abogada de 40 años es la creadora de “Barbie Buscadora”, una muñeca que venden para obtener recursos y que ha servido para sensibilizar y crear empatía con el movimiento de familiares que luchan para encontrar a sus familiares desaparecidos.
Es tal su influencia que el nuncio apostólico, Franco Coppola, la llamó hace tres años a una reunión en la Ciudad de México en donde, lejos de recibir el consuelo que esperaba, salió regañada porque, le dijo el representante del Vaticano, la descomposición social que padece el país es en parte su culpa. Delia llevaba una carta para el Papa, pero éste no la quiso recibir.
Su madre, María Isela Valdés incluso se arrodilló frente al presidente Andrés Manuel López Obrador en junio de 2019 para pedirle que las autoridades buscaran a su hijo Roberto Quiroa Flores, desaparecido en Tamaulipas.
“Necesitamos que toda la sociedad se sensibilice. Hasta al crimen organizado hay que sensibilizarlo. Que hagan su negocio con el tráfico de la droga y las armas, eso nunca va a parar y no les pedimos eso, pero es innecesario que secuestren, maten y desaparezcan, y que duremos nosotras años y años buscando. Es una agonía que no termina”, comenta doña María.
—¿Cómo sensibilizarlos? —se le pregunta a la activista de 63 años.
“Que los gobernantes se sienten a platicar con ellos. Se reparten los territorios, [los narcos] les pagan las campañas, les dan dinero y apoyo. Si se ponen de acuerdo para tener el poder y el control, ¿por qué no para pacificar al país? Tendría que ser una tregua al más alto nivel y tendrían que participar los diputados, senadores, la Suprema Corte, la Presidencia y la FGR [Fiscalía General de la República]”.
—¿Y qué le pide al Poder Judicial?—.
“Que los ministerios públicos integren bien las carpetas y hagan bien las investigaciones; que se dote a los policías de lo necesario porque salen a investigar y se ponen en riesgo; a los jueces, que atiendan y reciban a la gente, que hagan los procedimientos y amparos como debe ser, y que se activen más las búsquedas e identificación de personas”.